Es común que una entidad del Estado diseñe amnistías, condonaciones, rebajas de deuda y algunos otros beneficios para quienes no cumplen a cabalidad con sus obligaciones. Pero no lo es que haya condiciones especiales para quienes se manejan bien. Este es el objetivo de dos novedosas líneas de crédito que el Banco Agrario lanzará al mercado el 24 de este mes.
Francisco Solano Mendoza, nuevo presidente, en propiedad, del único banco estatal de primer piso del país, habló con Portafolio sobre este tema y la estrategia de la entidad.
¿Cuáles son los temas en los que se concentrará como presidente del Banco Agrario?
En cuatro frentes. 1) Mejoramiento en crédito y cartera. 2) Inclusión financiera. 3) Desarrollo rural. 4) Vivienda rural.
¿Qué se va hacer en materia de crédito? ¿Habrá nuevas líneas?
Sí. El 24 de este mes lanzaremos un producto para los clientes que se portan bien y que tienen buenos hábitos de pago. Ellos recibirán un cupo de crédito especial que se otorgará para consumo y/o capital de trabajo.
Y ¿cuál es la diferencia con las demás líneas que hay en la banca privada?
Primero, a tasa de interés muy baja, aunque todavía no hemos definido el porcentaje. Y la otra diferencia es el tipo de cliente al que se le otorga. Mientras la banca comercial privada les otorga estos préstamos solo a personas asalariadas que demuestren un ingreso mensual fijo, nosotros lo hacemos con productores independientes que viven del campo. También es importante la agilidad en la aprobación de estas líneas.
¿En ambos casos, consumo y capital de trabajo, tendrá límites en el monto y en los plazos?
Dependerá de la capacidad de endeudamiento. Pero en la primera fase, el de consumo tendrá un tope de hasta 10 millones de pesos. Los medianos y grandes podrían tener acceso a un monto superior. Estos créditos funcionarán como un cupo rotativo hasta a 48 meses, con amortización mensual.
En capital de trabajo el monto es hasta 30 millones, plazo máximo de 24 meses, pero la amortización será semestral.
Y tenemos otro frente, similar al de inversión, que es un préstamo con tasa subsidiada, que se otorgaría con recursos Finagro. En este caso, el trámite se tomaría máximo ocho días.
¿Por qué no han definido las tasas para estos préstamos?
Lo único que le puede decir es que vamos a tener la mejor tasa del mercado para los clientes.
¿El Banco tiene interés en seguros agropecuarios?
Sí. Es un tema prioritario para nosotros. El Banco Agrario vende cerca de 480 mil pólizas de seguros de vida y exequial al año. Este es un caso de éxito para AON.
Ahora vamos a trabajar en seguros agropecuarios. Estamos hablando con aseguradoras y reaseguradoras. Con Sura, tenemos en estudio un plan piloto y también hemos hablado con Mafre, al igual que con La Previsora.
Miraríamos los riesgos climáticos, fitosanitario y pecuario.
El Ministerio de Agricultura, Finagro y el Banco están trabajando con el Banco Interamericano de Desarrollo, al igual que con la Federación Nacional de Cafeteros en este tema. La fase uno consiste en definir el índice para un seguro paramétrico, la dos es un convenio de cooperación con Canadá sobre seguros rurales y un tercer frente consiste en definir un seguro catastrófico para una protección fiscal que ampararía al Gobierno para cubrir situaciones de emergencia en el sector agrícola. Habrá un cuarto frente que es el de un seguro de crédito que nos permita amparar la cartera.
¿Y qué papel van a jugar los gremios en el seguro agropecuario?
Los gremios tienen que ser nuestros principales aliados en este tema. Ellos tienen toda la información tanto de los productores como de los propios cultivos. La idea es crear un fondo para la cobertura.
El Ministro de Agricultura quiere darle un vuelco al programa de vivienda rural ¿Qué ajustes planean?
No habrá más convocatorias para que no haya sesgos de concentración de los proyectos en los municipios más eficientes. Esto se sustituirá por asignación de cupos por departamento.
Se estandarizarán cinco tipos de vivienda, se eliminará la diversidad de diseños, y se definirá el porcentaje de subsidio a otorgar. La idea es que las casas sean más grandes. En el 2015 entregaremos 100.000 viviendas rurales.
¿Habrá más municipios con Banco Agrario?
Claro que sí. Hoy tenemos 745 oficinas en 724 municipios en operación y más de 7.024 corresponsales bancarios.
La idea del Banco es llegar al 100 por ciento de los municipios. Estamos abriendo oficinas a un ritmo de entre cuatro y cinco al año. Pero además, estamos invirtiendo en tecnología.
¿Cómo va la firma de los pagarés para el Fonsa?
Son 80.000 pagarés, de los cuales el 94 por ciento son de nosotros. Eso es tan grande como el tamaño de cualquier banco. El valor de la cartera total está entre 450.000 y 470.000 millones de pesos. Debemos tener todos los pagarés firmados a finales del primer trimestre del 2015. Este año lo cerraremos en alrededor de 60.000.
¿Qué papel va a jugar el Banco en el posconflicto?
Seremos el brazo financiero del posconflicto. Nuestra participación será muy importante en este proceso. Y nos estamos preparando para eso.
Edmtov@portafolio.co