Desde que el Gobierno, a través de la Aeronáutica Civil, comenzó a analizar la solicitud de integración las aerolíneas Viva y Avianca, en agosto del año pasado, el proceso se fue tomando más tiempo del esperado, mientras se cocinaba una crisis que estalló en un mes, con la suspensión de operaciones de la low cost a finales de febrero, y la parálisis anunciada por Ultra Air este miércoles.
En medio de un cambio de jurisprudencia para el análisis a cargo de la autoridad aeronáutica, debido a la anulación de la petición inicial y el comienzo de un nuevo proceso, el Gobierno, a través del ministro de Transporte Guillermo Reyes, dijo en varias oportunidades que el análisis se haría pensando en los usuarios y en evitar posiciones dominantes en el mercado aéreo.
(Avianca advierte que Viva Air ya no tiene la misma capacidad operativa).
Pero, como dice la sabiduría popular, una imagen vale más que mil palabras, y así lo muestra la siguiente fotografía tomada en el aeropuerto José María Córdova de Rionegro (Antioquia), que muestra los aviones de Viva y de Ultra Air parqueados y, justo detrás de ellos, una aeronave de Avianca.
Mientras que Viva y Ultra Air están en tierra, operadores como Avianca y Latam Airlines están tomando posiciones.
Jáiver Nieto / Portafolio
“Es paradójico que estén quedando en el mercado las tres aerolíneas denominadas legacy o aerolíneas tradicionales, que ya ofrecen unas tarifas para tratar de asimilarse a las de bajo costo. Sale un actor, a mi modo de ver, fundamental, como fue Viva, que transformó la forma de volar en Colombia y que creó un nuevo perfil de consumidor”, aseguró Claudia Velásquez, analista y experta del mercado aeronáutico.
(Hasta un 14% han subido los tiquetes por parálisis de Viva)
Y señaló que, si esto le pasó a Ultra Air, que lleva un año el mercado, ahora “los usuarios nos regresamos al mercado de hace 10 años y ojalá no a las tarifas que teníamos hace 10 años”.
Este jueves, tras el cierre de Ultra Air, comenzó a ser evidente la tensión de pasajeros en aeropuertos como el de San Andrés o Rionegro, que quieren viajar, pero tienen que esperar a que se abra un cupo en las sillas de protección que tengan disponibles Avianca o Latam Airlines, ya que la prioridad estaba siendo la atención de los viajeros damnificados por el cierre de Viva.
Según el Ministerio de Transporte, antes del cierre Ultra Air tenía un saldo de 377.000 tiquees vendidos hasta marzo de 2024, mientras que del 30 de marzo al 10 de abril la cifra es de 16.000 pasajes afectados en Semana Santa, en las rutas a San Andrés, Cali, Cartagena, Rionegro, Santa Marta y Bogotá.
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