El ‘tradicional’ eje cafetero o zona cafetera del país, conformado por los departamentos de Caldas, Quindío, Risaralda y Antioquia, ha perdido lentamente ese protagonismo que tuvo en la producción y la participación en la economía cafeteras.
Nariño, Huila y Cauca son los que hoy tienen mayor peso en la producción y en el área sembrada del país. Y es que la cifras lo dicen todo.
Según el Sistema de Información Cafetera (Sica) el área sembrada ha mermado 10,4 en Caldas, 15,76 en Quindío y 14,78 en Risaralda. Por su parte, el porcentaje de la producción cayó 14,04, 14,62 y 17,93, respectivamente, en los tres departamentos.
Entre muchas otras razones los cafeteros mismos han reconocido la atomización de los predios, pues de una sola finca de cinco hectáreas ahora hay cuatro, resultado de las herencias de tierra en esta zona del país.
Se suma que, ante la expansión de las áreas urbanas y semiurbanas, los planes de vivienda ocupan hoy zonas que hasta hace pocos años eran cafeteras.
También puede destacarse la migración de la población rural hacia las ciudades intermedias o hacia el exterior, por lo que muchos predios cambiaron de actividad hacia otras, como el agroturismo.
Además, el valor de la tierra se ha incrementado de forma exponencial.
Precisamente, esto ha hecho que la gente deje el cultivo del café, pues en las áreas renovadas representa ingresos por unos 800.000 pesos mensuales por hectárea, menos lucrativo que otros negocios que puedan hacerse en la misma unidad de superficie.
Para el caso del departamento de Antioquia, quizás donde el cultivo es de mayor arraigo, la Federación Nacional de Cafeteros registra para este año un área sembrada de 131.123 hectáreas, 15,75 por ciento de la producción nacional.
En 1997 sumaron 125.212 hectáreas y 16,6 por ciento de la producción.
Así las cosas, su crecimiento (de 5.911 hectáreas) ha sido vegetativo y la explicación es casi la misma que para los demás departamentos del ‘eje’.
Nariño, Huila y Cauca, los ‘nuevos’
La Federación Nacional de Cafeteros reconoció en un reciente informe que existe una profunda transformación en la base productiva del grano.
Si hasta hace unos años las cosechas más grandes se registraban en Antioquia y el antiguo Caldas, hoy en día están en el triángulo conformado por Nariño, Huila y Cauca.
Nariño está llamado a liderar el ‘nuevo’ eje cafetero, junto con Huila y Cauca. La razón fundamental está en el incremento del área sembrada, que en 13 años, creció 63,6 por ciento.
Además, viene haciendo un intenso lobby para el reconocimiento de su denominación de origen.
Para el caso de Huila (queha crecido 54,8 por ciento), vale la pena destacar que el municipio de mayor producción en Colombia es Pitalito.
Cauca , por su parte, tam,bién ha entrado, con fuerza, particularmente en la producción de cafés especiales.