María Cortés de Chaves, fundadora de una de las empresas más emblemáticas creadas en el país, Laboratorios de Cosméticos Vogue, falleció el pasado lunes por la noche en Bogotá.
Las primeras versiones del suceso apuntan a que la empresaria sufrió complicaciones cardiacas.
Esta barranquillera fue protagonista de una de las historias de emprendimiento más destacadas del país.
De fabricar esmaltes para uñas con los utensilios de cocina de su casa, Cortés de Chaves pasó a liderar un imperio en el negocio de la belleza que la llevó a vender sus productos, no sólo en Colombia, sino también en Panamá, Perú y Bolivia, entre otros países en Latinoamérica.
UN EJEMPLO EMPRESARIAL
Laboratorios de Cosméticos Vogue S.A. arrancó en 1955 por la iniciativa de Cortés y su esposo, Roberto Chaves.
Tras el cierre de la fábrica donde María trabajaba, la empresaria junto a su esposo, decidió montar su propia empresa en el garaje de su casa, ubicado en ese entonces en la calle 23 con carrera 29 en Bogotá.
Empezaron vendiendo 10 mil frascos de esmalte en negocios de barrios, en una camioneta que compraron con las cesantías de su esposo.
Los hijos de la pareja eran los encargados de poner las etiquetas en los frascos después de llegar del colegio.
Cincuenta años después, la empresa no solo tenía posicionadas en el mercado nacional sus marcas Jolie de Vogue, Wendy y Vanity Collection; también se convirtió en la patrocinadora oficial del Reinado Nacional de la Belleza y sus productos llegaban a todo el territorio colombiano y a más de cinco países de América Latina.
Sin embargo, no todo en la historia de la compañía fue un jardín de rosas.
A finales de los 90, la empresa tenía deudas inmanejables, y en el 2001 debió acogerse a la Ley 550, o de quiebras, para poder refinanciar sus obligaciones financieras.
Después de un trabajo arduo y muchos sacrificios, la compañía, bajo el liderazgo de Cortés de Chaves, no solamente logró cumplir con sus acreedores, sino que, tras la crisis, pudo alcanzar una de sus grandes metas: llegar al mercado de los Estados Unidos, donde tiene posicionados más de 75 puntos de venta.
UNA VIDA DE RECONOCIMIENTOS
Esta hazaña le valió a la empresa el Premio Ave Fénix de la Superintendencia de Sociedades y la Universidad del Rosario, en el año 2010, reconocimiento que se les otorga a las empresas que logran superar un proceso de reestructuración.
Pero no fue el único reconocimiento que obtuvo la empresaria.
En el 2012 recibió el premio a toda una vida al emprendimiento que entrega Ernst & Young (E&Y), en alianza con Portafolio.
Y el mismo año la organización Women Corporate Directors (WCD) le otorgó un reconocimiento por su “liderazgo estratégico en América Latina, su aporte significativo para la industria y ayudar al desarrollo de la economía de Colombia”.
Desde el 2012 la firma francesa L’Oréal adquirió Laboratorio de Cosméticos Vogue S.A.
“Para mí ha sido un gran dolor. La verdad, dejar esta compañía es como desprenderme de un hijo, porque, realmente, la he cuidado por 57 años y he creado la marca”, señaló Cortés de Chaves en una entrevista publicada en ‘El Tiempo’ en el 2012.
Ayer, tras conocerse la noticia del fallecimiento de la empresaria, el director general de L’Oréal Colombia, Alejandro Eastman, manifestó su pesar. “Lamentamos profundamente la partida de la señora María Cortés de Chaves. Sin duda alguna, contribuyó significativamente a la industria de los cosméticos, la moda y, por supuesto, a la belleza de las mujeres colombianas”, señaló el ejecutivo.
LA INDUSTRIA DE LOS COSMÉTICOS EN COLOMBIA ESTÁ DE LUTO
Cortés de Chaves no solo fue fundadora de una gran empresa, también es reconocida como una pionera en la industria de los cosméticos y de la moda en Colombia.
La marca Jolie de Vogue no solo es la patrocinadora oficial del Concurso Nacional de la Belleza desde 1986, la empresaria también promovía grandes certámenes de moda y diseño en el país.
Por eso, ante su partida, la industria está de luto.
El cuerpo de Cortés de Chaves es velado en la Funeraria Gaviria, ubicada en la calle 98 No. 17A - 20, y la misa será en la parroquia La Inmaculada Concepción, en la carrera 11A No. 88-12.