Bancóldex seleccionará a las empresas más promisorias por su capacidad financiera, historia comercial y vocación exportadora para prestarles de manera directa, con el fin de evitarles el costo de la intermediación financiera. De hecho ya está en pruebas piloto.
Mario Suárez Melo, quien el 4 de septiembre se posesionó como presidente de la entidad, explica cómo será esto y su papel en la coyuntura económica del país.
¿Qué está haciendo Bancóldex en este momento?
Varias cosas, estamos reanimando la financiación destinada al sector exportador, porque esas líneas habían decaído, pues las exportaciones mismas cayeron dramáticamente, los bancos comerciales venían ofreciendo unas más asequibles. Según un estudio del MinComercio, entre los años 2015 y 2016, aparecen 1.120 barreras arancelarias y no arancelarias. Es un sector que decae por la situación misma y porque resulta obstaculizado.
¿Qué otras conclusiones les arrojó ese estudio?
Son dos. La primera es que tenemos líneas y recursos suficientes para apoyar al sector exportador. Son $5 billones, a través de créditos en dólares, créditos en moneda nacional, otras líneas de apoyo y de modernización, por mencionar algunos.
¿Cuál fue la segunda?
La segunda es que no solo a través del crédito podemos trabajar por el fomento de las exportaciones; como banco tenemos un mandato legal para fomentarlas. Si el crédito no es el instrumento decisorio para hacerlo, debemos acudir a otras cosas.
¿Cómo cuáles?
Tenemos 10 cosas. En primer lugar, hicimos un convenio con las universidades Agraria y del Rosario para investigar por qué no se están aprovechando al máximo los TLC; vamos a ver cuáles son los obstáculos para las exportaciones. Para esto, tenemos el Datlas Colombia, un big data hecho por la Universidad de Harvard y de aplicación mundial.
¿Cuáles son las otras?
Vamos a hacer un esfuerzo concreto por reincentivar la relocalización. Estamos proponiendo que se creen estímulos tributarios para las empresas que se reubiquen en las zonas próximas a los puertos, como se creó con la Ley Páez.
También, trabajar en la integración de las cadenas globales de valor y mayor utilización de las zonas francas. Tenemos 101, pero no están operando a todo vapor. Queremos que se estabilicen totalmente y, por ello, tenemos créditos para sus operadores y desarrolladores.
Asimismo, líneas orientadas a apoyar la llegada o fortalecimiento de compañías anclas en el país –hay empresas modelo en producción y es útil traerlas a Colombia–; apoyos financieros para la adquisición de nuevas tecnologías e identificación de las tendencias mundiales con un enfoque de reconversión industrial.
Además, anticipar el marco ambiental para evitar restricciones posteriores de este tipo o un ineficiente uso de energía; financiar la inserción progresiva en otros mercados, pues se conquistan poco a poco, y finalmente, la guerra de los trámites innecesarios; no vamos simplemente a denunciar esto, sino que haremos una inversión para tener una oficina que los localice, y vamos a traer a primer plano las consecuencias del comercio irregular.
¿Qué más quieren hacer?
Queremos otorgar créditos directos sin necesidad de un intermediario financiero, pero no significa bajar el banco al primer piso, pues no tenemos la capacidad para hacer préstamos de ventanilla ni estamos para eso.
Entonces, ¿de qué se trata?
Se trata de seleccionar a las mejores empresas por su capacidad financiera, historia comercial, contribución a las exportaciones o por su cooperación al desarrollo, para decirles “nosotros los vamos a atender directamente sin intermediarios financieros”.
¿Y eso qué garantiza?
La disminución de la tasa, porque se está eliminando la parte del intermediario, aunque no totalmente, y tienen la posibilidad de influir en sectores importantes para el país.
¿Están estudiando posibilidades de crédito directo en este momento?
Sí. Hay una empresa grande que está financiando con nosotros un nuevo puerto y un grupo empresarial en Cartagena que tiene dos cadenas de producción para su labor, y como necesita una tercera nosotros los financiaríamos directamente. Igualmente, se financiarán proyectos escogidos. En una prueba piloto ya se ha iniciado la financiación directa.
¿Han hecho desembolsos?
No, no hemos hecho todavía desembolsos en esa línea de crédito. Estamos avanzando en el estudio de estas posibilidades.
¿Cuál es el papel que tiene Bancóldex en la coyuntura de la economía nacional?
La contribución al sector empresarial es a través de todo esto y de tres cosas más.
Cuando cogimos el IFI (Instituto de Fomento Industrial) también asumimos la financiación a todo el sector empresarial, a toda la parte productiva de la economía. Antes éramos solo exportaciones.
Ahora, estamos sacando una línea especial para fomentar la reanimación de determinados sectores, al igual que estudiando otras líneas para el sector textil y el hotelero. Somos el instrumento financiero para el manejo de créditos que atiendan coyunturas sociales especiales. Un banco común y corriente presta para ganar, nosotros lo hacemos para desarrollar.
¿A futuro cómo ve el rol de la entidad en el sector financiero?
Con un crecimiento progresivo, que depende del respaldo que se tenga del Gobierno Nacional y de la orientación que este le dé al país. Somos un instrumento para las políticas que desarrolle el Estado.
María Camila Vera
camver@eltiempo.com