La apertura esta semana en Bogotá de la primera tienda en Colombia de la empresa brasileña Expor Manequins fue el resultado de un estudio de mercado que duró tres años, a pesar de que ya enviaba algunas exportaciones al país.
El vicepresidente de la compañía extranjera, Guillermo Andrade, dice que, entre otros, hicieron varias visitas a la feria Colombiamoda y exploraron la compra de competidores en Medellín y Cali, pero finalmente se decidieron por el ‘Green Field’ (Terreno Verde).
En ese tiempo también se dieron cuenta que el mercado nacional era sensible al precio y uno puede valer entre 650.000 a 800.000 pesos, y algunos hasta 1,2 millones también por unidad.
Paralelamente, Expor Manequins detectó que el mercado vale unos 13 millones de dólares, y puede subir en a corto plazo a 15 millones de dólares.
La apertura del primer local de Expor Manequins en la capital del país costó 450.000 dólares, pero no descartan inaugurar otras.
Además, están explorando subir la meta de los ingresos de los primeros 12 meses de la operación, que era de 1,5 millones de dólares, a 2,5 millones de dólares.
Según agrega Andrade, en unos cinco años la facturación anual de Expor Maniquís de Colombia -que es el nombre que pusieron a la filial en el país para operar- puede subir entre ocho a 10 millones de dólares.
Adicionalmente, nuestro mercado podría pasar a representar una parte importante de la facturación de la compañía, que es de unos 45 millones de dólares anuales. En Brasil tienen el 70 por ciento del mercado de maniquíes.
El próximo paso en Colombia de Expor Manequins es adquirir una bodega para manejar los inventarios. Luego entrarán a analizar la apertura de planta de producción, que se sumarían a las que tiene en Brasil y México, y los centros de producción en Asia que se los proveen.
Uno de los factores diferenciadores de la marca, sin embargo, es que desde hace 12 años usa las resinas plásticas en la elaboración de los maniquíes y no la fibra de vidrio, a la que por sostenibilidad ambiental se recurre cada vez menos.
“También desarrollamos un maniquí que no se rompe fácilmente ni raya, y eso nació de las necesidades de clientes. Es decir que más que vendedores de maniquíes somos consultores”, agrega Andrade.
Las representaciones de los maniquíes son igualmente llamativas, con el fin de causar un impacto en el consumidor, e influir en la decisión de compra.
POLO DE LA MODA
El directivo también considera que el mercado ‘cafetero’ de maniquíes es maduro, por lo que debían llegar con producto impactante, entre otros, con posibilidades de 1.200 posturas, atavíos muy creíbles y colores impregnados en la resinas.
Sin titubeos, Andrade dice que otra motivación para entrar al mercado colombiano fue el hecho de que lo consideran un centro de diseño, moda y confección líder en Latinoamérica, inclusive por encima de su propio país.
En su opinión, el país vecino es un mercado más grande, pero por diseño y creatividad y Colombiamoda -la cual considera la feria más impactante de Latinoamérica- lo supera en proyección.
El segundo a bordo de Expor Manequins también considera que el comercio al por menor en Colombia es muy desarrollado, y si quieren ser líderes regionales debe ser uno de sus mercados claves.
“Colombia es un país tranquilo que mejora y lucha por superar sus problemas, y eso ya lo conocemos; entonces nos centramos en la oferta de valor”, acota finalmente Guillermo Andrade, vicepresidente de Expor Manequins.
Rolando Lozano G.
Redacción Economía y Negocios.