Nestlé volverá a manejar directamente la planta de leche en polvo que tiene en Valledupar, como parte de la terminación de un matrimonio de 10 años entre la cooperativa lechera neozelandesa Fonterra y la multinacional de alimentos.
Así lo indicó Manuel Andrés presidente de Nestlé Colombia, al explicar el impacto del fin de la alianza anunciado ayer desde Suiza.
El acuerdo permitió la constitución de una sociedad llamada Dairy Partners Americas (DPA), de la que poseen cada una el 50 por ciento.
Así, las fábricas DPA de leche en polvo en Brasil, Argentina, Ecuador y Colombia pertenecerán de nuevo a Nestlé, tras una negociación en la que compra a su antiguo socio la parte que le correspondía.
En Colombia, dejará de operar DPA Manufacturing, en lo que hace varios años fue la planta que era de Cicolac, dedicada a la producción de leche en polvo.
Según se informó, ocurrirá lo mismo con las actividades de productos lecheros líquidos de Ecuador. Por su parte, la actividad de productos lecheros refrigerados y líquidos en Venezuela será retomada por Fonterra, que garantizará su gerencia con un socio local.
En Brasil será conservada sin embargo la asociación para la comercialización de productos refrigerados. Fonterra tiene el 51 por ciento de la participación en este sector y el 49 por ciento restante es de Nestlé.
En todo caso, el acuerdo debe ser avalado por las autoridades competentes. Se espera que el acuerdo se materialice en unos meses. “Durante diez años, DPA tuvo buen desempeño”, indicó el grupo con sede en Le Vevey, en las riberas del lago Leman, en el comunicado.
“Ahora llegó la hora de reorientar la asociación para replicar las estrategias respectivas de Nestlé y Fonterra en la región”, agregó.