La familia Spiwak ha visto en el servicio y la hospitalidad su vocación. Iniciaron esta receta del éxito en el Valle del Cauca con el hotel que lleva su apellido y que abrió sus puertas hace ocho años encima del Centro Comercial Chipichape, y en este proceso le apostaron a crecer y mantener un concepto claro, rescatando las raíces a través de las representaciones culturales.
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¿Cómo se va a llamar el nuevo hotel y con que contará?
Ya tenemos el concepto y será el Spirito, que como su nombre lo indica es espíritu en italiano, y la idea es que este hotel tenga impregnado el espíritu de la ciudad. Se construyó con una filosofía arquitectónica similar al hotel actual, en el sentido en que es abierto, con mucha luz y brisa natural, lo cual ha gustado mucho porque es diferente a los hoteles urbanos ya que no se siente artificial.
Tendrá una distribución distinta al actual; serán cuatro torres anguladas de doce pisos que suman 267 habitaciones y con áreas que varían desde los 35 hasta los 70 metros cuadrados. El arquitecto encargado fue el que hizo el primer hotel, Joe Delgado, quien también desarrolló el concepto interno, el color de Cali, y para que eso se vea reflejado, hemos puesto una pared de 8 metros en el sitio de desayunos en el que pintaremos un grafiti con alma urbana y lo renovaremos cada año.
¿Cuál es espíritu de Cali que van a destacar?
Cali tiene una cultura urbana muy fuerte, esta ciudad es una productora de contenidos que se está tomando Colombia. Estoy convencido de que el momento cultural que tiene el país tiene un sello caleño, del Valle o del Cauca, porque la música, las expresiones artísticas, el cine, el baile, las artes plásticas y toda su proyección es de la región, todo eso es lo que tendremos en este hotel. En las habitaciones habrá afiches que son hechos por La linterna, una imprenta que lleva más de 100 años, y veremos cómo se ha empapelado la ciudad para los grandes eventos a lo largo de las décadas. Entrarás a la habitación y se podrá ver el anuncio de un concierto de hace 40 años y todos esos hitos culturales. Además, estaremos apoyando, como ya lo hacemos, proyectos de renovación urbana para cambiar la imagen que se tiene de Cali.
¿Será el complejo hotelero más grande de la región?
Si, seremos tan grandes que con el Spiwak de 226 habitaciones, y el Spirito de 267, solo seremos superados en el país por el Tequendama en Bogotá o Las Américas en Cartagena.
¿Cuál ha sido la propuesta de valor cultural que tiene la cadena hotelera?
Hemos visto que apoyar la cultura es parte del enfoque y de lo que queremos. Con la Fundación Spiwak lo hemos hecho, apoyamos La Feria del libro, ejecutamos este evento con el apoyo de Juan Camilo Sierra y buscamos no solo promover la lectura y visibilizar a los escritores locales, sino tomar los espacios públicos de la ciudad, cambiando la idea de que la violencia sigue luego de 30 años.
Ahora las personas están saliendo a las calles y han visto cómo los espacios olvidados tienen valor no solo histórico sino que también pueden resignificarse al dárselos a la ciudadanía.
¿Qué piensan apoyar con la fundación y con Spirito?
Tenemos un proyecto grande en torno al hotel, con un parque de 17.000 metros cuadrados para hacer una replantación de especies locales y rescatar el ecosistema; queremos también destacar las aves que tiene Cali ya que el Valle concentra la mayor cantidad de especies del país y ponerle espacios para caminar, disfrutar el avistamiento y el paisaje.
¿Cuándo es la apertura y la inauguración del hotel?
Se abre en diciembre, pero inauguraremos en marzo de 2019, porque como son 4 torres, se estarán entregando durante los próximos meses.
¿Cómo ven el nuevo turismo en el país?
Hay un futuro enorme en el turismo vacacional, porque tradicionalmente la hotelería en Colombia ha sido vista como corporativa y ya no, la gente está viajando para conocer, para descansar, para ver cosas diferentes, y el Valle tiene una gran potencia cultural con expresiones como la salsa, la Feria de Cali y los conciertos.
Cali tiene shows permanentes de baile que no tiene otra ciudad, entonces la apuesta es que renazca como un centro cultural. Pero también le apostamos al Bird Fair, el evento de avistamiento de aves pues en el ecoturismo también hay potencial por descubrir.
¿Cambia la imagen de la ciudad por no ser de Cali?
Con todo nuestro trabajo, lo que hacemos es demostrarle al mismo caleño que la ciudad tiene todos esos atributos para ofrecer. Para los turistas, sean extrajeros o no, es interesante comerse un cholao o una lulada en un parque, comer empanadas, escuchar salsa en un bar histórico en San Antonio, ver los sitios de los que hablan las canciones y eso ya es un producto turístico. Eso el caleño tradicional lo ve como algo mundano e intrascendente, por eso hay que apostarle a mostrarlo como algo único incluso para los locales que ven; cómo las cosas se han transformado.
¿Cuál va a ser la principal diferencia entre el Spiwak y Spirito?
Son distintas categorías, no es que uno sea más que el otro, es solo que le apuestan a públicos distintos. Las habitaciones de Spirito son un poco más pequeñas y los servicios que se ofrecerán son diferentes y queremos apuntarle a un público más joven.
¿Y la idea de poner espacio para eventos?
Queremos que el viajero tenga todo a sus pies, tenemos ahora no solo uno sino dos centros comerciales, porque el Centro Comercial Chipichape se unió ahora con Pacific Mall y allí pueden encontrar lo que requieren. Ahora también le apostamos a los eventos porque en el turismo de negocios no había una capacidad en la ciudad de albergar grandes eventos y la idea es que ya lo tengan, porque tendremos 13 salones de eventos y un gran salón con la capacidad para 700 personas; así responderemos a esa necesidad que tiene el país para los eventos medianos que reúnen entre 500 y 1.000 personas y les ofrecemos tener todo en el mismo lugar.