Una venta anunciada en las últimas horas, la cual tiene que ver con el sector hidrocarburífero del país, sacudió el negocio de importación y transporte de gas natural.
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El movimiento, fue de tal magnitud que no solo recompuso el mapa de actores en este frente, sino que de paso abonó el terreno para la entrada a Colombia de un protagonista de nivel mundial a la industria gasífera.
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Se trata de Royal Vopak, multinacional de transporte de hidrocarburos con sede en Rotterdam (Holanda), la cual adquirió el 49% de participación en la planta regasificadora de Barú, que estaba en manos de SCL Energía Activa (Sclea) y Augusta Management (Augusta), y que es operada por la Sociedad Portuaria El Cayao (Spec).
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La compañía europea centra desde hace varios años su negocio en el almacenamiento y manejo de productos refinados del petróleo, como aceites y lubricantes; así mismo, químicos, aceites comestibles y productos relacionados con el gas natural.
Sin embargo, Royal Vopak en las últimas dos décadas ha fortalecido su operación a nivel global en terminales y almacenamiento de Gas Natural Liquado (GNL), lo que le permite su cotización en la bolsa Euronext de Amsterdam.
NEGOCIO Y OPERACIÓN
Esta multinacional holandesa nació de la fusión, en 1998, de las compañías Royal Pakhoed y Royal van Ommeren.
Ambas firmas ofrecían servicios de almacenamiento de petróleo, productos petroquímicos, aceites vegetales, etc. También estaban activas en el mercado de transporte marítimo (petroleros) y otros servicios logísticos relacionados con la operación hidrocarburífera.
Además de sus actividades superpuestas, Van Ommeren ofreció transporte de mercancías pesadas a través de Dockwise y Pakhoed, así como servicios de distribución de productos químicos a través de la empresa Univar.
En el negocio de terminales regasificadoras y petroleras, Royal Vopak ya tiene kilómetros de experiencia recorridos.
Además de montar y operar la primera terminal de GNL en Rotterdam, maneja una infraestructura de características similares en la localidad de Eemshaven, en el norte de Holanda.
Así mismo, tiene presencia en China, ya que junto a la Compañía de Desarrollo e Inversión del Estado (CDIE) de este país, además de construir el terminal petrolero de Yangpu para petróleo crudo y productos derivados del petróleo, también lo opera, y planea el montaje de una nueva.
EL ANUNCIO DE LA VENTA
Sin revelar el monto de la operación, la citada venta fue anunciada al mercado por Sclea y Augusta, empresas que ofertaron su porcentaje de participación.
Cabe recordar que Spec es la primera y única terminal de regasificación de GNL en Colombia, la cual comenzó operaciones en 2016 y cuenta con una capacidad de 400.000 pies cúbicos diarios (pcd) de regasificación y 170.000 metros cúbicos de almacenamiento.
El complejo de Spec cuenta con contratos a largo plazo con tres importantes plantas de generación térmica de energía eléctrica: Tebsa, Termiocandelaria y Zona Franca Celsia.
Además, Sclea y Augusta invirtieron en Spec en 2014 desde su fase inicial como proyecto en asocio con Promigas, empresa líder del sector gas a nivel regional, quien mantiene su participación del 51% en la terminal de regasificación.
Para el desarrollo de la operación, las dos compañías fueron asesorados por diversos especialistas de BNP Paribas en la venta, White & Case y Gómez Pinzón Abogados en los aspectos legales y Frontier Economics en los temas técnicos.
Por su parte, Royal Vopak recibió el respaldo legal, financiero y técnico por De Brauw Blackstone Westbroek y Philippi Prieto Carrizosa Ferrero DU & Uría.
PLANTA CLAVE PARA SECTOR ENERGÉTICO
Desde su entrada en operación, la terminal regasificadora de Spec ha hecho posible que las principales térmicas del país respondan oportunamente a los despachos y redespachos del sector energético, teniendo en cuenta la naturaleza variable del sistema de transmisión eléctrica.
“La terminal ofrece una flexibilidad que es clave para el sector térmico, pues responde y se adapta al patrón de consumo variable y poco predecible que tienen las plantas en Colombia”, sostuvo el gerente general de Spec, José María Castro.
El respaldo brindado por la terminal de regasificación de GNL le permitió al país afrontar de forma satisfactoria eventualidades en los sistemas de transmisión eléctrica y de gas natural, y mitigar la incertidumbre por efectos del fenómeno de ‘El Niño’.
En el presente año, el complejo ha recibido dos buques metaneros con cerca de 127.000 metros cúbicos de GNL y ha prestado servicios de regasificación durante más de 70 días, para entregar más de 3.100 millones de pies cúbicos de gas natural al Sistema Nacional de Transporte.
En el 2018, Spec recibió siete cargamentos con 553.000 metros cúbicos de GNL y regasificó durante 232 días para entregar 10.352 millones de pies cúbicos de gas natural.
“Es importante resaltar que a través de nuestra terminal, Colombia tiene hoy la posibilidad de acceder a cualquier fuente de gas natural licuado del mundo, bajo los más altos estándares internacionales de operación y tecnología avanzada”, dijo el gerente general.
De esta manera, la planta de regasificación se ha ratificado como un seguro vital para el sector energético, pues ha cumplido con la entrega del gas natural requerido por sus clientes.