Cabify, la plataforma de transporte de pasajeros española, tiene en la mira dos objetivos claros: seguir creciendo en Latinoamérica a través de su ‘hub’ en la región, Colombia, y conseguir alianzas con otros actores y convertirse en una solución integral de movilidad.
Por eso, la compañía firmó este año una alianza estratégica con Easy Taxi, una de las ‘app’ de amarillos más descargada en América Latina.
Cabe destacar que aunque el pacto lleva fraguándose desde finales del año pasado y se firmó a mitad de año, para Juan de Antonio, CEO de Cabify, es apenas el inicio de una serie de coaliciones que quieren llevar a cabo.
Portafolio habló con su CEO sobre los planes de la compañía en Colombia y a nivel global para continuar consolidándose como ‘app’ de transporte.
¿Por qué está de visita en Colombia?
Hay un evento esta semana, el South Summit, que busca ser un ecosistema inversor y emprendedor, y me invitaron a participar. Aprovecho cualquier oportunidad para visitar Colombia. Además, para nosotros Colombia es uno de los cuatro principales mercados y por eso, trato de venir varias veces al año.
¿Cómo ha llegado Colombia a ocupar ese puesto que tiene para la compañía?
Fue el cuarto país que abrimos y ha ido ganando peso. Al principio, estábamos enfocados en el sector corporativo, lo cual restringía la capacidad de crecimiento. Pero cuando nos unimos al sector particular, vimos un gran crecimiento.
¿Cuál es el peso que tiene Colombia para Cabify?
Es nuestro cuarto mercado más importante. Y en términos de recursos humanos, también es un mercado que está produciendo buenos ejecutivos que luego exportamos a otros países. La calidad del talento en este territorio, nos hace considerar a Colombia como un ‘hub’ regional para Cabify.
Ustedes entraron hace poco al negocio de los carros particulares. ¿Cómo han avanzadoen regular ese servicio?
Hemos estado trabajando de la mano de los reguladores para buscar una solución a una realidad: los habitantes de las ciudades en Colombia quieren una alternativa a su vehículo particular y la regulación limita esas oportunidades.
Y en ese sentido, hubo un momento en el que Cabify tuvo que tomar la decisión. Llevábamos mucho tiempo buscando una fórmula más cooperativa con el regulador, pero vimos que era la única opción.
¿Cómo han avanzado los acercamientos con el Gobierno para buscar una salida en términos de regulación?
Antes de entrar a Colombia, yo me reuní con el Ministerio de Transporte, con la municipalidad y siempre hemos tenido esa voluntad cooperativa, pero muchas veces los actos y las palabras no van en la misma dirección. Y seguimos con total disposición a colaborar.
¿En qué países sí se han logrado acuerdos entre el Gobierno y la aplicación?
Hay países como Brasil, en São Paulo, donde se reguló el uso de estas plataformas. Y gracias a esa regulación, ahora la ciudad puede planear mejor su sistema de transporte a través de los datos e información que las plataformas le podemos suministrar a cada administración.
¿Qué tan cerca ve que eso se pueda aplicar en Colombia?
Por nuestra parte, mañana. Desde el punto de vista del regulador, las cosas están un poco más lejos. Y es un tema muy polémico, pero la realidad es que Cabify no es el sustituto del taxi. Lo que vemos es que crece el tamaño del mercado del transporte y las personas siempre están buscando alternativas de calidad y de seguridad.
Y en las ciudades en las que estamos, crece el mercado pero no necesariamente disminuye el tamaño de la industria del taxi. Hay espacio para todos.
A propósito de eso, se ha hablado de una alianza con Easy Taxi, ¿cómo está ese proceso?
Va bien. Cada marca tiene su segmento de clientes. No hay muchos puntos en común en Colombia. Son dos marcas separadas, con dos equipos distintos, en donde que cada organización una ofrece su propio producto.
¿Cómo ha sido todo ese proceso, si se tienela percepción que los taxis y estas plataformas son rivales?
No somos enemigos del taxi. Hay un objetivo en común de ambas compañías, que es mejorar la movilidad de las ciudades. Y eso significa que puedes andar en un taxi, otras veces un Cabify, otra una bicicleta y estamos buscando alianzas con todo ese ecosistema de movilidad.
En el futuro, hacia donde va esto, es que igual que se paga por un paquete de datos para el celular, o la electricidad o el agua, habrá un momento en el que se pague por movilidad como servicio. Por eso, es importante que todas las compañías de transporte trabajemos juntas y así buscar un bien común.
¿Es decir que buscan más alianzas de este tipo para seguir creciendo?
La lógica es conseguir acuerdos con cualquier compañía de movilidad. Estamos viendo posibilidades con bicicletas, con motos, y la meta es buscar todo tipo de alianzas en ese sentido. Incluso, en reparto a domicilio.
¿Qué se vienepara Cabify en 2018?
Nos queda mucho por hacer en Colombia. El tamaño del mercado potencial es enorme. Esperamos crecer al menos un volumen de cuatro o cinco veces de lo que somos ahora. Eso no significa necesariamente abrir en más ciudades pero sí crecer en las que ya estamos. Lo que sí, es que seguiremos invirtiendo en el país.
María Camila González
marola@eltiempo.com