Cuidar la sangre y tener un control de todas sus alteraciones no es sencillo, la clave está en que su diagnóstico sea oportuno y especializado.
En Colombia, desde 2017, Werfen, una empresa española, se encarga del suministro de sistemas de alta calidad, software y reactivos para laboratorios y hospitales, así como lo hace en de todo el mundo.
Las tres misiones que busca cumplir este año son: mejorar la conectividad del point of care, implementar guías de práctica clínica para gestión de sangre a través de tromboelastometría y un test especializado para el adecuado diagnóstico con una eficacia de un valor pronóstico negativo mayor al 98%.
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Esto quiere decir un mayor control sobre las pruebas de los pacientes, una gestión adecuada, tener menos errores, resultados más precisos y el pronto inicio de un tratamiento en el caso de ser necesario.
La empresa inició su operación de manera directa en el país con una inversión superior a los 8 millones de dólares en su etapa inicial y tiene tres focos de negocio altamente definidos (hemostasia, cuidado agudo y autoinmunidad). Estos, bajo el plan estratégico de inversión extranjera catalana hacia la región.
“Nosotros estamos en el país hace unos diez años, pero lo hacemos de manera directa desde hace dos, ofrecemos un soporte clínico y servicio técnico, además del control de las unidades de alta complejidad. Nuestros productos están incluidos en el Plan Obligatorio de Salud, por lo tanto el acceso es inmediato y la cobertura es casi completa”, señaló Leandro Moreno, director general de Werfen Colombia.
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De acuerdo con el directivo, Colombia es el centro de inversión de distintas compañías ibéricas y “ara el caso de Werfen, no solo buscan expandirse geográficamente, sino “poder participar en los sistemas de salud a través de tecnología de alta calidad, que brinda soluciones inteligentes en el laboratorio clínico así como en servicios de alta complejidad”.
Además del estudio de la calidad de la sangre y las principales afecciones, la compañía se ha decidido por apostarle a la renovación de conceptos clínicos sobre los avances para el diagnóstico y tratamiento en el país.
“De por sí ya estamos muy enfocados en la detección de muchas de las afecciones y en reconocer esos factores que no tiene el organismo de manera natural para hacer el control. Tenemos un alto foco en los pacientes con desordenes de coagulación que son tratados en IPS especializadas, en donde hay acceso a tratamiento y control”, agregó.
En el caso en que no se pueda tratar el caso, el Ministerio de Salud tiene mecanismos para su acceso.
“La condición de la sangre de los colombianos es buena, las enfermedades de la sangre son huérfanas porque no hay una gran cantidad de población afectada, pero, por eso, se debe mejorar el diagnóstico y hacer un buen seguimiento, incluso para el control de gasto. Entre dos y ocho minutos se tarda en el diagnóstico, una hora si se tiene en cuenta la toma de la muestra”, indicó.
Además de la eficiencia en el diagnóstico, el riesgo de las enfermedades en la sangre varía de acuerdo a la detección que haga el médico tratante.
“Queremos aportar a tener un sistema de salud más integral, también a capacitar y actualizar a los médicos sobre las patologías asociadas y sus últimos avances”, puntualizó.