Después de dos años de obras, la compañía Yanbal culmina el aumento de capacidad de su planta de producción de bisutería que está en el municipio de Facatativá, en Cundinamarca.
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La expansión es en 50% más de lo que tenía, lo que le permite la producción de 9 millones de joyas al año, de unas 1.000 referencias en total.
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Hace dos años, alcanzaban los 7 millones. En ese orden de ideas, queda capacidad instalada suficiente para atender futuros aumentos de la demanda.
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Así lo explicó Carolina Herrera, gerente nacional de ventas de Yanbal, quien explica la dimensión de la modernización que implicó una inversión de US$9 millones.
Básicamente, la planta en Colombia es fundamental para el abastecimiento de la marca en nueve países. Además, complementa la labor de su planta en Perú, explica la gerente de ventas. “La inversión de Yanbal y los esfuerzos de expansión demuestran la confianza que tiene la corporación en Colombia en esta expansión, cuya consolidación tardó dos años”, resalta la ejecutiva.
Colombia exporta unos US$56 millones en bisutería, parte de los US$100 millones que mueve la compañía de venta directa dentro de esa categoría.
Actualmente, desde el país, Yanbal exporta a Perú, Bolivia, Ecuador y Venezuela. Igualmente, lleva este tipo de mercancía a Guatemala y México.
Desde hace unos dos años, comercializa bisutería hecha en Colombia en el mercado de Estados Unidos, como primera línea para entrar a ese mercado, aunque ya está llevando otros productos de la marca a ese país.
Otros clientes de su joyería están en España e Italia, dijo la gerente nacional de Ventas de Yanbal, al presentar los avances del negocio y las estrategias para que crezca la línea.
En el mercado interno, sostuvo la ejecutiva, esta categoría es apreciada por las mujeres colombianas que son amantes de la moda, teniendo en cuenta la exclusividad y los diseños modernos que caracterizan las piezas que se elaboran.
Y si bien hay inmersa algún grado de industrialización hay un componente artesanal importante, en el que manos maestras y expertos joyeros participan en la fabricación.
De las 580 personas que trabajan el proceso de producción de bisutería, 450 de ellas son mujeres.
Justamente, Yanbal tiene para este año, como una de sus estrategias de promoción de producto hacerle conocer al país todo lo que hay detrás de la producción de bisutería, línea en la cual la marca y su portafolio es destacado según diversos estudios.
Una de las investigaciones de mercado, de la firma Kantar, muestra que Yanbal es líder en bisutería en Colombia.
Se estima que el 22% de los consumidores colombianos de joyas de alta bisutería prefieren sus productos. Eso se suma a que Yanbal es la primera marca de venta directa en el país.
Carolina Herrera destaca que todo este trabajo beneficia a las 200.000 mujeres, que hacen parte de la red que comercializan sus productos y las 4.500 empresarias que tiene en el país.
Con estos productos de alta calidad “ayudamos a las mujeres para que saquen adelante a sus familias”, comentó Herrera.
Con exportaciones, Yanbal facturó el año pasado en Colombia $685.000 millones. Y para este 2018, la meta es llegar a los $750.000 millones. La compañía es optimista sobre el comportamiento del mercado local.
LA CREACIÓN
El primer paso para concebir una pieza Yanbal lo dan los cool hunters o “caza tendencias”, quienes visitan las pasarelas de los epicentros de la moda como Londres, París y Nueva York, para inspirarse con las propuestas más innovadoras y definir los conceptos que marcarán tendencia.
Un grupo de diseñadores joyeros, entre estos el colombianos Diego Moncada, liderados por Jacqueline Thompson, directora de diseño de Yanbal International, quien trabajó en casas como Givenchy y Monet, empiezan una investigación para desarrollar piezas que respondan a las necesidades de la mujer actual, basados en análisis de mercado que determinan su esencia, estilo y personalidad.
Una vez definido el diseño, se digitaliza en 3D para definir su grosor, forma y tamaño, esto con el fin de elaborar el molde que le dará forma a cada pieza: dijes, cadenas, broches, y todas las partes que componen la colección de bisuterías.
Una vez extraídas las piezas de los moldes, estas son talladas y pulidas a mano por los artesanos de la planta Ensambladas todas las piezas, se realizan los baños en oro, plata, rutenio o paladio y se esmaltan si es el caso.