El nuevo Plan Nacional de Desarrollo (PND), le dio una visión integral al Gas LP (GLP) al incluir los principales retos del sector: abastecimiento, crecimiento de la demanda y acciones contra la informalidad. El Gobierno y el Congreso están jugados en llevar al país hacia un escenario de fuentes de energía renovables y, dentro de ese propósito, está el impulso al uso del gas LP por ser un combustible limpio y con la portabilidad que le permite llegar por igual a las grandes ciudades y a los sectores rurales más apartados del país.
En cuanto al abastecimiento, el PND dispone que se incentivará la oferta nacional en forma prioritaria, lo cual es acertado porque al precio del gas LP importado hay que sumarle el costo del transporte desde Estados Unidos. Como plan B, ordena que se deben incentivar y proteger las inversiones requeridas para que el país pueda importar el gas LP que se llegare a necesitar para la demanda actual y la proyectada, con los nuevos usos que el PND avizora. Con ello se garantizará el abastecimiento y la continuidad en la prestación de este servicio público, que hoy beneficia a más de 12 millones de personas –en 1.050 municipios del país– la mayoría de ellas en Antioquia, Cundinamarca, Nariño, Bogotá, Valle del Cauca, Santander, N. de Santander, Cauca, Meta, Boyacá y Risaralda, entre otros.
El impulso a la oferta nacional e importada se materializará dentro del marco del Plan de Abastecimiento de GLP que el PND dispone sea realizado por la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme) cada 2 años. En este plan se deben identificar los proyectos de infraestructura de transporte y almacenamiento necesarios para incentivar la oferta nacional y la infraestructura de importación. El Ministerio de Minas y Energía deberá adoptar estos planes de abastecimiento y la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) expedir la regulación sobre remuneración y ejecución de las inversiones identificadas y revisar la metodología para determinar las tarifas de transporte de GLP por ductos.
Estas previsiones del PND dan un parte de tranquilidad a los usuarios actuales y potenciales del mercado, porque ordenan las acciones necesarias para asegurar el abastecimiento y la continuidad del suministro de GLP, asuntos que también favorecen el crecimiento de la demanda de este combustible.
Desde la perspectiva del crecimiento de la demanda, el PND ordenó impulsar cuatro segmentos del mercado. Dispone que se estructure e implemente un programa de sustitución de leña y carbón por GLP, que trae grandes beneficios de salud por la mitigación de enfermedades respiratorias generadas por la contaminación de los fogones alimentados con leña y carbón, así como beneficios ambientales ayudando a reducir la deforestación. También ordena aumentar el ingreso de vehículos limpios, entre los cuales están los que utilizan GLP (autogas) y su incorporación al sistema de transporte público vía cofinanciación presupuesto general de la Nación, de la mano con el Ministerio de Transporte.
Se dispuso la promoción de proyectos de sustitución de diésel por GLP, como una alternativa más limpia y económica para generación de energía eléctrica en zonas no interconectadas. De hecho, es importante señalar que, con base en análisis de IHS Markit, a partir de enero del año entrante se disparará a nivel internacional el precio del diésel, ya que por disposiciones ambientales de la Organización Marítima Internacional, buena parte de la flota mundial de buques deberá pasarse a este combustible, lo que aumentará sustancialmente la demanda mundial de diésel.
Por último, en materia de crecimiento de la demanda, se condiciona la asignación de recursos públicos al gas combustible teniendo en cuenta análisis de eficiencia económica cuando estos recursos estén destinados a la ampliación de la cobertura del servicio público domiciliario. Esto quiere decir que no se podrán financiar proyectos de expansión de cobertura sin el previo análisis de eficiencia económica, dándole equidad a la asignación de recursos públicos destinados a los usuarios de gas natural y de GLP.
En cuanto a la informalidad en el mercado del GLP, el PND establece que se debe fortalecer la labor de vigilancia y control de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios mediante la creación de un grupo especial que hará seguimiento a las operaciones de los sectores eléctrico y de gases combustibles. En buena hora se ordena crear este grupo porque es fundamental la Superintendencia para asegurar el cumplimiento al marco regulatorio del sector del gas LP, la formalización del mismo.
Finalmente, debe resaltarse que el Ministerio de Minas y Energía acaba de publicar para comentarios los reglamentos técnicos que se requieren para que arranque el uso del gas LP en el sector automotriz (autogas). Esta es una excelente noticia porque ello implica que se dará luz verde para que los consumidores puedan contar con una nueva alternativa de carburante vehicular, el más usado a nivel mundial después de la gasolina y el diésel.
Con todo ello, el gas LP está en la canasta nacional de combustibles con un claro reconocimiento de que se trata de una fuente excepcional de energía.