El jefe de Estado, Iván Duque, sancionó recientemente la ley 1950 de 2019, por medio de la cual puso en vigor el Acuerdo de Adhesión de Colombia a la Convención de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, Ocde, suscrito en París, Francia, el 30 de mayo de 2018. Con esta acertada decisión oficial, fundamentada en el sabio principio de construir sobre lo construido, se perfeccionó nuestro ingreso como miembro de pleno derecho a este organismo internacional.
Es forzoso reconocer que el entonces presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, comenzó a soñar hace ocho años con el proceso de adhesión a la Ocde, mediante la solicitud formal de ingreso de nuestro país al denominado ‘club de las buenas prácticas’, conformado entonces por 34 naciones industrializadas, incluyendo a México y Chile.
El proceso de adhesión a la Ocde se desarrolló de manera gradual y sistemática, a través de una detallada ‘hoja de ruta’, que permitió confirmar la voluntad política y la capacidad técnica del país para asumir las obligaciones derivadas de la armonización de las políticas estatales en 23 comités temáticos. Colombia completó satisfactoriamente las valoraciones y progresos exigidos bajo la dirección de la representante colombiana en la Ocde, Catalina Crane.
El Consejo ministerial de la Ocde aprobó por unanimidad, en mayo de 2018, el ingreso de Colombia, fundamentado en el pleno acatamiento de sus compromisos y en la similitud de pensamiento entre el país y sus miembros, respecto de los valores democráticos, vigencia del Estado de Derecho, respeto de los derechos humanos, economía de mercado y desarrollo sostenible.
Colombia aceptó todos los instrumentos jurídicos vigentes de la Ocde en el momento de la decisión del Consejo, con plazos adicionales para varios compromisos, entre ellos, la determinación de precios de transferencia, modelos de impuestos sobre la renta y capital, convenciones sobre productos químicos, sustancias peligrosas y residuos; reservas sobre varios asuntos tributarios, liberalización de movimientos de capital y régimen de patentes; excepciones de trato nacional para la inversión extranjera en la industria pesquera, compra de tierra, servicios de seguridad y vigilancia, radio y televisión. Componentes todos de política pública, que fueron objeto de negociación durante el proceso de adhesión. Colombia también solicitó participar en el Foro Mundial sobre Transparencia e Intercambio de Información con Fines Fiscales y en el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos, Pisa.
En el diálogo exclusivo con Portafolio publicado el lunes, el presidente Duque le informó al país que había suscrito un memorando de entendimiento con la Ocde para mejorar las políticas nacionales en materia anticorrupción, que servirá de base para replicarlo en cuestiones relacionadas con justicia, educación, salud, ciencia, tecnología e innovación. Por último, Duque declaró que Colombia espera cooperación y orientación por parte de esta organización en el diseño, estructuración y adaptación a la realidad colombiana de buenas políticas públicas y empresariales.