Las noticias sobre el virus originado en China no paran y los números de pacientes continúan aumentando.
A Enero 29, acorde con Caixin Magazine, el número de infectados alcanzaba 6.080 y 9.239 posibles casos de infección, con pacientes en todas las provincias de China, incluyendo el Tibet donde confirmaron un caso al finalizar el miércoles.
El manejo de la crisis por parte del Gobierno Chino es resaltable. Beijing ha reforzado los controles de movilidad en uno de los momentos más álgidos que es el año nuevo chino, tiempo en el cual se movilizan cientos de millones de personas a sus ciudades natales. El número de personas infectadas es relativamente bajo para los retos demográficos que implica China.
Paralelamente, el hospital de Wuhan se espera esté finalizado el 2 de febrero con un tiempo récord de 10 días. Este hospital será el lugar en el cual se concentrará el tratamiento y cuarentena de la infección en el lugar donde se originó el virus.
Al mismo tiempo, el rol de Xi Jinping ha sido de control inminente, evitar la movilización de personas, neutralizar los posibles focos de más infecciones y extender el feriado Chino hasta el 10 de Febrero con miras a tener una ventana adicional de tiempo que evite altas concentraciones de personas.
Sin embargo, a pesar del gran trabajo del gobierno, la crisis tiene impactos económicos. Acorde con The Economist, en 2019 China representó el 16% del PIB Mundial, lo cual significa que hay una gran dependencia global en el comportamiento del consumo y producción del país.
A la fecha, más de 30 aerolíneas han cancelado sus vuelos a China, Hong Kong ha cerrado el tránsito de personas provenientes desde territorio Continental y Rusia está considerando el cierre de su frontera oriental.
Lo anterior significa una puesta en stand by para muchas industrias partiendo desde el turismo, la comercialización de perecederos (los mercados de plantas y animales se encuentran bajo cuarentena), la disponibilidad de rutas logísticas y el transporte de mercancías. Paralelamente el consumo se ha reducido pues las personas están evitando exponerse y salir a las calles, la extensión del feriado chino una semana más significa un menor consumo y la productividad en fábricas. Starbucks es un índice pues la compañía ha cerrado preventivamente más de la mitad de sus tiendas en China que en total suman cerca de 4.300 cafés. Las acciones de Foxconn han caído en 10% y similares han sucedido en otras industrias que enfrentarán una producción lenta en el primer trimestre del año.
La realidad actual refleja la alta dependencia económica que tiene la economía global en el comportamiento de China como mercado de consumo, receptor y productor. Sin embargo, a manera de predicción en base a los controles estipulados por Beijing, podríamos considerar que la crisis no se extenderá más allá de Marzo y esperamos un comportamiento comercial en recuperación a partir de Abril.
David Pérez
david.perez.rendon@gmail.com