La Organización Mundial del Comercio desde 1994 no ha avanzado en las negociaciones comerciales, y la nueva (ya anciana) Ronda de Doha, mal llamada del desarrollo, se encuentra paralizada y moribunda. En la OMC se consagraron las bases de las asimetrías en comercio, servicios, inversión y propiedad intelectual.
En liberación de mercancías, pese a que bajaron los promedios arancelarios, se mantuvieron picos y contingentes para los productos que interesaban a los países menos desarrollados, las barreras no arancelarias (sanitarias y técnicas), los subsidios internos a la agricultura, las normas proteccionistas antidumping y la ausencia de controles multilaterales a los abusos de las posiciones de mercado de multinacionales (agroquímicas, farmacéuticas, etc.), puesto que no se negociaron normas en materia de competencia.
Se incluyeron acuerdos limitados sobre y solución de controversias, aunque se concedieron beneficios monopólicos excesivos a las patentes, los derechos de autor y demás normas sobre el capital conocimiento. Desde la Ocde se intentó imponer un nuevo acuerdo multilateral de inversiones que satisficiera los intereses de las empresas globales, el cual se negoció en secreto, básicamente entre EE. UU. y Europa.
Afortunadamente, para el mundo, el Consejo Ecuménico de las Iglesias denunció las negociaciones subrepticias y los países en desarrollo (China, India, Brasil, entre otros) impidieron que se aprobara.
Pero los países desarrollados y sus grandes empresas son insaciables. Impusieron Acuerdos Bilaterales de Protección de Inversiones (en bienes, servicios, capital del conocimiento, de portafolio y hasta deuda externa), con soluciones de diferencias que casi siempre pierden las economías en desarrollo en el Centro Internacional de Diferencias (Ciadi), del Banco Mundial, y otros tribunales de arbitramento, con cesiones de soberanía de la democracia de los poderes jurisdiccionales nacionales en una meritocracia de árbitros que solo respetan la seguridad jurídica cuasiabsoluta de los inversionistas, así se afecten gravemente derechos fundamentales a la salud, la educación, el medioambiente y la soberanía y sostenibilidad alimentaria.
Sin embargo, a pesar de los positivos resultados para los ricos de grandes economías y en razón de las mínimas aperturas efectuadas en bienes, servicios y circulación de personas, la población de esas economías rechaza los acuerdos, pues afectan el empleo y el ingreso y, además, la creciente xenofobia propone cerrar fronteras, expulsar migrantes o levantar muros.
En EE. UU., más violento el candidato republicano que la aspirante demócrata, proponen en las campañas denunciar los acuerdos bilaterales o renegociarlos (Dios nos libre). En Europa, parte de Bélgica se opone a la refrendación del acuerdo con Canadá y lo bloquea, no se avanza con el Mercosur y convenios globales de mayor alcance están en cuidados intensivos, por la evidente aversión a su aprobación por los poderes legislativos.
Es el regreso al pasado, resultado de las asimetrías de la globalización, xenofobia, y cierre de fronteras. Ojalá en nuestra región sea el resurgimiento de la integración latinoamericana, denunciando los injustos Tratados de Protección de Inversiones y no el regreso a un proteccionismo malsano y a los nacionalismos populistas.
Germán Umaña Mendoza
Profesor universitario
germanumana201@hotmail.com
columnista
¿Regreso al pasado?
A pesar de los esfuerzos en la apertura económica, todavía hay vientos de proteccionismo que hacen retroceder al pasado.
POR:
Germán Umaña Mendoza
-
guardar
save_article.message.success_title save_article.message.successsave_article.message.success_updated_title save_article.message.success_updatedHa ocurrido un error al intentar guardar este artículo
- Reportar error
- Seguir economía
Lo más leído
Destacados
Más Portales
Nuestros columnistas
día a día
Lunes
martes
Miércoles
jueves
viernes
Camilo Sánchez
Inconveniente humo constituyente
Nuestra responsabilidad histórica está en evitar que cantos de sirena sigan dividiendo al país.
María Sol Navia V.
¿Ha logrado la mujer superar barreras?
Otros Columnistas
Importancia del agua en agenda empresarial
Gonzalo Gallo González
Shoganai - Gamán
Rafael Herz
Liviandad y crueldad
Camilo Herrera Mora
Fundador de Raddar
Críticos
Victor Muñoz
Emprendedor, investigador, analista
Rumbo al Armagedón en el 2026
Rodrigo Villamizar
Director Electra CDP
Colisión de tarifas e importación de gas: una bola de nieve social
La gente demanda es que bajen los precios de la electricidad que consumen.
Ricardo Santamaría
Analista
Hay María Corina para rato
La historia de estas elecciones en Venezuela es que quizás nunca lleguen a realizarse.
Cristina Vélez
Decana Escuela de Administración, Universidad Eafit