Dos hechos de los últimos días han llenado de optimismo el panorama económico: la virtual elección de Joe Biden como presidente de Estados Unidos, y el anuncio de Pfizer y BioNTech de que la vacuna que vienen desarrollando tendría una efectividad superior al 90 por ciento para prevenir el Covid 19.
El impacto de esas noticias no se hizo esperar. Las bolsas del mundo se dispararon, la acción de Pfizer aumentó alrededor de 7 por ciento, el precio del petróleo Brent se incrementó en un porcentaje similar, y el dólar en Colombia perdió cerca de 100 pesos y cayó a niveles que no se veían desde hacía meses. Estos efectos sugieren que muchos han empezado a ver la luz al final del túnel de la incertidumbre política en Estados Unidos, y de la lucha contra la pandemia.
Sin embargo, conviene detenerse en el verdadero impacto de ambas noticias. Empecemos por las elecciones estadounidenses. Aunque los resultados numéricos parecen inapelables, no hay que desestimar el potencial perturbador de las demandas de la campaña de Trump, sobre todo teniendo en cuenta que alguna puede llegar hasta la Corte Suprema de Justicia, donde se aseguró una amplia mayoría conservadora. Al margen de cuál sea la solidez de esas demandas, la incertidumbre sobre la transición crecerá y traerá inestabilidad a los mercados. Además, no está claro cuál sea el verdadero efecto reactivador de un gobierno de Biden. Lo que están celebrando las bolsas es sobre todo que la mayoría del Senado seguirá siendo republicana, lo que asegura que se mantengan los bajos impuestos corporativos, pero a la vez complica el esperado paquete de gasto público de Biden.
Del lado de la pandemia las noticias tampoco arrojan mayor certeza. Los crecientes confinamientos en Europa han tendido un signo de interrogación sobre el cierre económico de este año y el comienzo de 2021, lo que puesto a muchos a recalcular el ritmo de recuperación del viejo continente. Por otra parte, aún falta un trecho para que la ilusión de la vacuna sea una realidad. Los experimentos de la última fase de Pfizer y BioNTech no han terminado aún, y además faltaría la evaluación de un panel independiente y el examen de la FDA antes de que el producto estuviera listo para la distribución.
Es indudable que en esta semana el panorama económico luce un poco más despejado que días atrás. Sin embargo, como en el cuento de Monterroso, el dinosaurio sigue ahí. La polarización en Estados Unidos dificultará notablemente la transición política y el accionar del próximo gobierno. Entre tanto, la pandemia sigue haciendo estragos y en el mejor de los escenarios la vacunación de la población más vulnerable no se alcanzaría antes del final del 2021.
Mientras tanto, en Colombia aún no sabemos cómo vamos a atender las necesidades del 48 por ciento de los colombianos que van a quedar en la pobreza después de la pandemia, ni cómo vamos a encontrar los 20 billones de pesos necesarios para empezar a enderezar las finanzas públicas. Como recomienda Larry David, lo mejor por el momento será moderar el entusiasmo.
Mauricio Reina
Investigador asociado de Fedesarrollo.
mauricioreina2002@yahoo.com