Hay cerca de 15,5 millones de colombianos que no votan, y son los más vulnerables. Nuestros niños, niñas y adolescentes menores de 18 años a quienes debemos acompañar en su desarrollo y garantizarles sus derechos. Un grupo de 100 organizaciones de la sociedad civil hemos entendido este reto y nos pusimos en la tarea de construir una ruta de incidencia en las campañas electorales y en el próximo Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022. #NiñezYa es nuestra premisa, y queremos que a través de planes y políticas intersectoriales eficientes protejamos a las nuevas generaciones.
Necesitamos que todos los colombianos, pero en especial los candidatos, entiendan cuáles son las políticas y acciones indispensables para cerrar las brechas de inequidad y salir del deshonroso octavo lugar que ostentamos entre los países más desiguales del mundo, circunstancia influenciada por lo que pasa con la población comentada.
El país requiere acciones inmediatas en seis frentes en este caso: Inversión social y políticas públicas; realización de derechos (salud, educación y participación); fortalecimiento familiar; protección contra todo tipo de violencias; sistema de responsabilidad penal adolescente (Srpa), y cultura de paz, reconciliación y convivencia.
Para darnos una idea de los retos que enfrentamos quisiera empezar por enfocarme en la importancia de la protección contra todo tipo de violencias. La tasa (por cien mil habitantes) de violencia sexual contra la niñez va en incremento, al pasar de 4,7 en el 2012 a 21,4 en 2016 y se estima que presenta un subregistro del 30 por ciento. Es inaudito que el 86 por ciento de los exámenes médicos legales por presunto delito sexual en el 2016, se practicaron a niñas, niños y adolescentes. La impunidad en los casos de violencia sexual es casi del 90 por ciento. Qué clase de condiciones de vida le estamos propiciando a nuestras nuevas generaciones.
Lastimosamente, la importancia del rol de la familia se ha desdibujado. Entre el 2014 y el 2015 se duplicaron los casos de negligencia y abandono infantil: pasaron de 7.719 niñas y niños en el 2014 a 15.454 niñas y niños en el 2016. En el 2016, 10.082 niños y niñas fueron maltratados en sus hogares por sus padres. Además, hay condiciones de pobreza en las familias que se reflejan en que más de la mitad de los hogares colombianos están con inseguridad alimentaria. El 45 por ciento de la población adulta en viene de hogares en los que ninguno de los padres tuvo educación y el 27 por ciento en los que la máxima educación fue primaria.
Aunque en los últimos años Colombia ha logrado un incremento en la atención a la primera infancia, menos de la mitad (48,4%) de las niñas y los niños menores de 6 años acceden a algún servicio público de educación inicial bajo el marco de la atención integral.
En el documento # Niñez Ya, de manera muy detallada y riguroso podrán encontrar más información sobre las necesidades apremiantes de nuestros 15.5 millones de niños, niñas y adolescentes y las acciones que el próximo gobierno debería emprender de forma inmediata. Es nuestra obligación moral como ciudadanos conocer muy bien las propuestas de los candidatos y exigir que #NiñezYa se priorice en las agendas. Si no lo hacemos, nunca vamos a resolver los problemas estructurales que arrastramos como sociedad.
Rafael Aubad L.
Presidente Proantioquia