La compañía naviera danesa Maersk Line, líder en el transporte de contenedores en el mundo, ve a Colombia como el epicentro de las grandes transformaciones que está teniendo el comercio en Latinoamérica. En entrevista con Portafolio, Robbert Van Troojen, presidente de la naviera para esta zona del mundo, asegura que todavía no se siente el impacto de la devaluación del peso en las importaciones colombianas.
¿Cuáles son los planes en Colombia?
Maersk está firmemente comprometida en impulsar el comercio en Colombia y, de esta forma, contribuir al desarrollo del país. Continuará siendo líder en el mercado de transporte de contenedores mediante la prestación de un servicio más cualificado y profesional a nuestros clientes. Con la creación de la marca SeaLand, ahora prestamos un servicio especializado para los tráficos de las Américas, acompañando, de una forma más cercana, el desarrollo que representan el dinamismo de la región y las nuevas alianzas económicas.
¿Cuánto invirtieron?
Como empresa de transporte de contenedores, Maersk Line invierte en naves, en nuevos buques cuando se detecta la necesidad.
Nuestra estrategia es crecer acompañando el crecimiento del mercado, tratando de estar disponibles cuando la necesidad se confirma.
¿Cuánta carga movilizan? Como naviera líder en el mercado colombiano tenemos una participación de mercado de doble dígito.
A pesar de que Asia experimentó una desaceleración económica, las importaciones en Colombia y el Caribe fueron mayores de lo esperado. Las importaciones y exportaciones crecieron, según lo esperado en el 2014. La principal carga fue productos de consumo.
¿Esa carga de dónde proviene?
Proviene mayoritariamente de Asia. Sin embargo, los mercados de Estados Unidos, Latinoamérica y Europa también son muy significativos.
¿Qué efectos ha tenido la devaluación del peso en el transporte marítimo?
Todavía es muy pronto para sacar conclusiones sobre el impacto de la devaluación del peso en las importaciones colombianas. El número de TEU movilizados durante el primer mes de 2015 ha sido similar al del mismo periodo del año anterior. Se percibe un ambiente de preocupación en los importadores y una especial preocupación en el efecto que los nuevos costos de importación puedan tener sobre la inflación del país. Colombia será más impactada por la baja de los precios del petróleo que podría afectar los ingresos del Gobierno.
Colombia tiene los fletes terrestres más caros de la región, ¿eso cómo afecta a la competitividad?
El costo del transporte terrestre tiene un impacto importante en la competitividad de los productos de exportación y en el costo final de los productos de importación necesarios para el consumo del país.
Por su parte, las empresas de transporte marítimo incurren en altos costos de almacenamiento de contenedores en el interior del país y la evacuación de equipos vacíos hacia los puertos, teniendo en cuenta el desbalance existente entre los volúmenes de importación y exportación.
Para tener crecimiento y lograr prosperidad a largo plazo es clave tener una infraestructura eficiente. Cuando se reducen los costos y el tiempo de transporte de las mercancías y alimentos, se mejora la calidad de los productos. Las empresas locales pueden ser más competitivas y los consumidores de todo el mundo pueden disfrutar de alimentos frescos y productos variados a precios más bajos.
Otro beneficio importante de un transporte eficiente es la reducción de los desperdicios que se producen durante el transporte de alimentos frescos.
¿Qué oportunidades se abren para Colombia con el acuerdo de Asia Pacífico?
Los acuerdos comerciales, definitivamente, ayudan a dinamizar el comercio y la compañía está preparada para brindar las más confiables opciones de transporte entre Asia y Colombia. Actualmente, somos los líderes de mercado en las rutas entre Asia y
Colombia y los barcos portacontenedores más grandes que llegan al país son precisamente barcos de Maersk Line, que cubren las rutas Asia – Latinoamérica, de forma directa.
¿Cómo esperan que se comporte el comercio latinoamericano este año?
Para Latinoamérica, esperamos un crecimiento estable en 2015. Sin embargo, la tasa de crecimiento estará lejos de alcanzar dígitos dobles. Aunque Latinoamérica se verá impactado por la baja de los precios del petróleo, la mejoría de la economía de Estados Unidos favorecerá, muy positivamente, el comercio en la región.
Si analizamos América Latina, más en detalle, pensamos que algunas regiones experimentarán crecimiento. La costa pacífica de América Latina (México, Colombia, Perú y Chile) se beneficiará de la Alianza Pacífica. Prevemos crecimiento, también, en el comercio intrarregional entre los países del continente americano (Estados Unidos y los países latinoamericanos).
Christian Pardo Q.