Si existía alguna duda sobre la necesidad de poner en marcha una estrategia para darle un impulso a la economía colombiana, esta quedó despejada el viernes, después de que el Dane informó que el desempleo en abril pasado había superado ligeramente el guarismo del 2014. El alza no es significativa, pero constituye un campanazo de alerta al cabo de meses de descensos en la desocupación.
Por otro lado, el retorno del pesimismo se había convertido en un motivo de inquietud. La encuesta que hace Fedesarrollo para establecer el talante de los consumidores venía mostrando deterioros importantes, mientras que por el lado de los industriales las cosas no se veían mucho mejor.
En consecuencia, era necesario dejar en claro que hay una serie de acciones coordinadas en curso, para hacerle frente al oleaje. Es verdad que buena parte de los 16,8 billones de pesos anunciados están destinados a programas que ya eran conocidos, pero eso no demerita el esfuerzo de identificar líneas de acción y ponerse metas concretas con el fin de no dejar para mañana lo que se puede hacer hoy.
Especialmente destacable es el empeño de usar las regalías para que le ayuden a la dinámica del sector productivo. Como es bien sabido, una parte de los fondos se había quedado sin usar, y justo cuando las rentas de los entes territoriales acusan el golpe, esa es una manera de evitar que sea igual de fuerte.
Por otro lado, hay que alabar las medidas sectoriales en favor de la industria, el turismo o la minería. Hay quejas específicas que fueron atendidas y le deberían ayudar a cada uno de esos renglones, en especial al fabril, cuyos laureles no se han reverdecido en la forma que tantos esperaban.
Aparte de ello, hay que hacerle seguimiento al paquete contenido en el Pipe 2.0 con una labor de diálogo que no responda necesariamente a tensiones con segmentos específicos. Y es que aparte de las cifras o los buenos propósitos, el Ejecutivo necesita acercarse a los empresarios, con el fin de mantener canales de comunicación que periódicamente deben despejarse. Eso también le ayudaría a la reactivación.
Ricardo Ávila Pinto
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