No era poca la tensión entre los operadores cambiarios al comenzar la semana. Por cuenta de la descolgada en los precios del petróleo y la reunión del Banco de la Reserva Federal en Washington para tocar el tema de las tasas de interés en Estados Unidos, todo apuntaba a un encarecimiento del dólar.
Sin embargo, las cosas terminaron en relativa calma. Para el martes, el precio de referencia de la divisa norteamericana será de 2.912 pesos, lo que equivale a un bajón de 68 pesos en siete días a pesar de que el barril de crudo continúa en niveles inferiores a los 52 dólares, cinco menos que hace un mes.
Según los conocedores, hay varias explicaciones. De un lado, el mensaje enviado por Janet Yellen, en el sentido de que el costo de los fondos de corto plazo para los bancos estadounidense no subirá demasiado. Leyendo entre líneas las palabras de la funcionaria, la conclusión fue que en lugar de cuatro aumentos en los intereses este año, habrá tres y que los saltos serán moderados.
Ese parte de tranquilidad relativo, hizo más atractivas las inversiones en las economías emergentes, cuyos números van en franca mejoría. Debido a ello, las monedas de los países en desarrollo ganaron terreno frente al dólar.
Por otra parte, es verdad que la cotización de los hidrocarburos es menor ahora, pero después de descender un peldaño la nota predominante es la estabilidad. Esa calma temporal sirvió para apaciguar las aguas turbulentas.
En lo que atañe a Colombia, tampoco se presentaron grandes cambios. Los expertos tomaron nota de que en enero, el déficit en la balanza comercial cayó a la mitad gracias al alza en las exportaciones y el estancamiento de las compras externas, con lo cual disminuyen los riesgos en este campo.
Saber si la tranquilidad en el precio del dólar será la constante en el futuro, es imposible. Los expertos aconsejan cautela y al mismo tiempo aceptan que la tempestad que venía, no se produjo.
Ricardo Ávila Pinto
ricavi@portafolio.co
@ravilapinto
retrospectiva
Calma tras la tempestad
Los expertos aconsejan cautela y al mismo tiempo aceptan que la tempestad que venía, no se produjo.
POR:
Ricardo Ávila
-
guardar
save_article.message.success_title save_article.message.successsave_article.message.success_updated_title save_article.message.success_updatedHa ocurrido un error al intentar guardar este artículo
- Reportar error
- Seguir economía
Lo más leído
Destacados
Más Portales
Nuestros columnistas
día a día
Lunes
martes
Miércoles
jueves
viernes
Camilo Sánchez
Inconveniente humo constituyente
Nuestra responsabilidad histórica está en evitar que cantos de sirena sigan dividiendo al país.
María Sol Navia V.
¿Ha logrado la mujer superar barreras?
Otros Columnistas
Importancia del agua en agenda empresarial
Gonzalo Gallo González
Shoganai - Gamán
Rafael Herz
Liviandad y crueldad
Camilo Herrera Mora
Fundador de Raddar
Críticos
Victor Muñoz
Emprendedor, investigador, analista
Rumbo al Armagedón en el 2026
Rodrigo Villamizar
Director Electra CDP
Colisión de tarifas e importación de gas: una bola de nieve social
La gente demanda es que bajen los precios de la electricidad que consumen.
Ricardo Santamaría
Analista
Hay María Corina para rato
La historia de estas elecciones en Venezuela es que quizás nunca lleguen a realizarse.
Cristina Vélez
Decana Escuela de Administración, Universidad Eafit