A todo mundo le gustaría poderse jubilar temprano en la vida y disfrutar de la seguridad económica y el mayor tiempo libre que los pagos periódicos de una mesada pensional hacen posibles.
A pesar de ello, el jubilarse temprano, como pasa en Colombia, tiene dos importantes costos para el país. El primero radica en que, con el abandono temprano del mercado de trabajo, se desperdicia un enorme capital humano que se ha acumulado en el transcurso de la vida de los ciudadanos a través de los estudios y la experiencia laboral.
A los 62 años muchos hombres -y aún más mujeres a los 57- podrían dar todavía una importante contribución a la sociedad. Pensamos, por ejemplo, a los docentes y al personal administrativo de las instituciones educativas.
El segundo costo tiene que ver con la financiación de la pensión: si vivimos más años y nos jubilamos a la misma edad de siempre, habrá que financiar años de prestaciones pensionales que no son fondeadas por años de contribuciones. Este es un problema muy serio en el sistema de reparto administrado por Colpensiones, que, al parecer, se convertirá en el más importante pilar del nuevo sistema pensional.
En este sistema, si aumenta la expectativa de vida de los pensionados, sin incrementarse los ahorros de los potenciales beneficiarios, el Estado deberá intervenir para cubrir la diferencia a través del presupuesto nacional, con lo cual aumentaría aún más su compromiso fiscal, ya muy elevado.
Bajo los parámetros actualmente vigentes -incluida la edad de jubilación- en el sistema de prima media las pensiones de salario mínimo son subsidiadas aproximadamente en un 70% y las pensiones más altas en un 30%.
Rehuirse a incrementar la edad estatutaria de jubilación implicaría aumentar aún más estos subsidios.
Ahora bien, en 20 años, la esperanza de vida de los colombianos al momento de pensionarse habría aumentado 3,5 años para los hombres y en 6,2 años para las mujeres.
¿Y en otros países de la región cuál es la edad de jubilación? En Costa Rica, México, Perú y (próximamente) Uruguay es de 65 años tanto para hombres como para mujeres. En Argentina los hombres se jubilan a los 65 años y las mujeres a los 60, al igual que en Brasil, Chile, Honduras y Cuba.
STÉFANO FARNÉ
Director del Observatorio de Mercado Laboral de la Universidad Externado de Colombia