Si se analizan las principales cifras petroleras del primer trimestre del 2014, observamos un retroceso si las comparamos con las del 2013, lo cual ha hecho prender las alarmas por la importancia del petróleo y el gas en las cifras macroeconómicas del país y en su futuro.
El problema mayor ha estado en la producción de crudo, pues la de gas sigue estando alrededor del millón de pies cúbicos diarios desde el 2009.
El millón de barriles de petróleo diario de producción fue una meta psicológica, la cual nos dio una gran satisfacción alcanzarla.
Haberla perdido en el primer trimestre del 2014 es motivo de genuina preocupación.
Al ser Ecopetrol el mayor productor y el más significativo de todo el sistema petrolero, su análisis nos dará una idea general del total.
En marzo del 2008, un eufórico presidente de Ecopetrol se comprometió con los accionistas hasta el 2015 a incorporar 256 millones de barriles de nuevas reservas anuales por resultados exploratorios y alcanzar una producción anual de un millón de barriles equivalentes por día.
A hoy, la producción está alrededor de los 785.000 barriles equivalentes diarios con tendencia a la baja.
¿Cómo conseguirá producir 215.000 barriles equivalentes por día adicionales en poco más de un año?
A diciembre del 2013, las nuevas reservas debían estar en 1.536 millones de barriles y no llegan al 10 por ciento de dicha cifra. Un descalabro de más del 90 por ciento.
El problema de la producción no se soluciona, como se ha visto, con más revaluaciones de las reservas de los campos existentes, ni aumentando los volúmenes de inyección de agua, ni aplicando nuevas tecnologías de recuperación como la Star.
El inconveniente de la producción se arregla cumpliendo con las nuevas reservas prometidas, que al 2015 deben ser 2.048 millones de barriles frescos.
¿Cómo conseguir una cifra similar al total de todas las reservas probadas del país en poco más de un año?
Es el incumplimiento del aumento anual de reservas de éxitos exploratorios el que tiene a Ecopetrol con un desplome en el valor de su acción, en una producción plana con tendencia a la baja, aumentando año tras año su apalancamiento financiero, incrementando el costo de producción al inyectar mayores volúmenes de agua, perdiendo la proyección de crecimiento de su producción y disminuyendo sus utilidades operacionales.
El Ministerio de Hacienda y Planeación Nacional conocen muy bien el costo, a partir de este año, para el país y las regiones del incumplimiento de Ecopetrol en la consecución de las reservas necesarias para su operación.
Sin duda, el endurecimiento en la consecución de las licencias ambientales y en la dificultad impuesta sobre la sísmica, al igual que el terrorismo, influye en la disminución actual en la producción. Pero estos no son problemas estructurales.
¿Existe una solución? Yo creo que sí, porque si no, el valor del ADR de Ecopetrol en New York podría llegar a un dígito en el 2017.
Víctor Salom
Ingeniero eléctrico