Se trata del vuelo más largo, después del viaje inaugural entre París y Bruselas el año pasado. Ese periplo coincidirá con el inicio de la construcción de una central termosolar, que será la más grande que se haya fabricado hasta la fecha, en en Marruecos.
El avión, que será piloteado por los pilotos suizos Bertrand Piccard y André Borschberg, debe cubrir la distancia entre Suiza y Marruecos en 48 horas.
La nave cruzará los Pirineos y el Mar Mediterráneo y tiene prevista una escala en la región de Madrid.
“Hemos aceptado sin dudar la colaboración con Marruecos. Ese destino corresponde totalmente a los objetivos que nos hemos fijado en materia de distancia y duración de vuelo”, explicó Borschberg, cofundador y director ejecutivo de la sociedad Solar Impulse.
“Recorrer esa distancia propulsado únicamente por la energía solar será un excelente entrenamiento en vistas de la vuelta al mundo” prevista para 2014, agregó Borschberg.
En Marruecos, el avión será recibido por la Agencia Marroquí para la Energía Solar, cuya misión consiste en desarrollar la energía solar en ese país.
De aquí al año 2020, Marruecos aspira construir cinco parques solares para alcanzar una capacidad de producción de 2.000 megavatios.
Solar Impulse es el primer avión concebido para volar de día y noche sin carburante ni emisiones contaminantes gracias a la energía solar.