En la vida laboral, ya sea independiente, ejecutivo o empleado, es primordial sentirse a gusto en el espacio donde se desarrollan ideas, se cierran negocios o nos comunicamos con los clientes: un buen espacio de trabajo genera satisfacción, que se ve reflejada en los resultados.
Según lo explica Carmen Lucía Murcia, diseñadora industrial y de interiores, un espacio de trabajo se puede ‘equilibrar’ teniendo en cuenta toda la construcción, desde la recepción, hasta el área de despachos, pasando por las diferentes oficinas; todas sus áreas comunes y de trabajo o simplemente el espacio privado de una oficina especifica; o áreas de oficinas abiertas donde no hay puestos fijos.
Para la experta en Feng Shui, generalmente, una empresa empieza a sufrir cambios en un periodo de tiempo específico, podríamos decir que la ‘energía’ de un espacio se cansa, así como las personas necesitan recargarse durmiendo o comiendo, un espacio físico necesita de renovación, de limpieza a nivel físico y energético, necesita de cambios. “Si seguimos haciendo lo mismo, conseguiremos los mismos resultados, si cambiamos, los resultados serán diferentes”, agrega.
Renovar el espacio de trabajo se hace cada vez más necesario en este ritmo de vida donde la tecnología cada vez es más necesaria y la satisfacción personal cada vez más escasa. En la empresa moderna se sacrifica satisfacción individual, por ello armonizar el espacio personal ayuda al ejecutivo o empleado a recuperar el sentido de pertenencia de una empresa.
Cuando se trabaja en una oficina abierta compartida con varios personas, se necesita crear una especie de refugio en su puesto; diferenciar su lugar del que está al lado, “necesitamos tres cosas: mi meta material a corto plazo, fotografía, imagen o un objeto que vea y me recuerde mi propósito: puede ser un viaje, un carro, la casa, la fiesta, ascenso, estudios, titulo… Tener este recuerdo frente a mí, es mi inspiración: como seres humanos vivimos en comunidad: una fotografía o recuerdo de mis hijos, mi pareja, mi familia (fotografías de tu familia, son sinónimo de compromiso con la gente), y por último, pero no menos importante, tener un objeto que le represente: qué me gusta: una planta (se recomienda el lucky bambú, un florero, un pisapapeles del mundo, un carro, futbol, un deporte, un cristal de protección, una imagen celestial…)”, agrega Murcia. Si ha logrado reconocimientos, premios en la empresa o a nivel personal y puede tenerlos en su escritorio, es muy favorable; representa la energía de reconocimiento, es la fuerza vital, es recomendable ubicarlos frente al puesto de trabajo, donde se vean siempre.
‘TIPS' CLAVE
1. Evite acumular demasiados papeles o carpetas; todos aquellos pendientes, van a su lado izquierdo, lo ya terminado al lado derecho.
2. Evite trabajar debajo de muebles o repisas, debajo de vigas o con columnas detrás de su escritorio; esto genera 'opresión' problemas de salud, dolor de cabeza.
3. El concepto de yin-yang, principio del Tao y uno de los conceptos básicos del Feng Shui, se puede aplicar de forma básica en un espacio de trabajo así: evite los espacios demasiado oscuros y fríos o demasiado calientes, con mucha iluminación, el exceso siempre demuestra desequilibrio y se ve reflejado en los resultados de cómo trabaja la persona.
Debe conseguir un equilibrio entre la cantidad de luz que entra a su oficina, la cantidad de objetos, la cantidad de sonidos, ni muy silencioso ni muy ruidoso.
EXPERTOS
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