El legado del que fue en su momento el país más exitoso en adoptar el socialismo, junto con la URSS y Venezuela, parece hoy desvanecerse cada vez más, por cuenta del restablecimiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
Apertura de embajadas, fomento de inversión extranjera y de intercambio comercial en distintos sectores, y la visita diplomática del presidente Barack Obama a La Habana, en marzo pasado, tienen en declive el proyecto político – económico de tinte socialista.
Cumpliendo hoy 90 años, el líder cubano ve desde su retiro cómo el país se inclina cada día más hacia prácticas políticas democráticas y de corte neoliberal.
Y es que expertos internacionales opinan que el potencial levantamiento del embargo incrementará el intercambio comercial desde y hacia la isla, lo cual se sumará a medidas impuestas por Raúl Castro, que ya vienen abriendo el país hacia aspectos de iniciativa privada, comercio y turismo.
No es gratuito, pues, que el próximo 31 de agosto llegue el primer vuelo regular desde EE.UU. al aeropuerto de la ciudad de Santa Clara, Cuba, lo que reactivará esta actividad después de 53 años, y que a partir de septiembre se hará de forma más constante.
Aun así, las restricciones al país permanecen intactas, pero se espera puedan levantarse próximamente, buscando que Cuba se expanda al mundo y termine así el último bastión de la Guerra Fría.
